Aplicaciones de las Nanopartículas Lipídicas el Tratamiento de Tumores Sólidos: Revisión de la Literatura
DOI:
https://doi.org/10.32635/2176-9745.RBC.2012v58n4.581Palabras clave:
Liposomas, Nanopartículas, Lípidos, Neoplasias, Antineoplásicos, RevisiónResumen
Introducción: Los nanocarreadores lipídicos son sistemas utilizados para direccionar fármacos específicamente para su sitio de acción y han atraído la atención de la comunidad científica, porque son sistemas biocompatibles y biodegradables. Eses sistemas pueden direccionar fármacos para los tumores sólidos, posibilitando una liberación duradera en el sitio de acción y con eso ampliando la utilidad de la quimioterapia antineoplásica. Objetivo: Revisar la literatura disponible acerca de los estudios en vivo que hablan de nanocarreadores lipóidicos que contienen fármacos citotóxicos, direccionados al tratamiento de tumores sólidos. Método: La investigación fue realizada en la base de datos Pubmed® de 2007 a 2011, con descriptores de tema: liposomes, lipid nanoparticles, cancer, in vivo, con el operador booleano and entre ellos, en inglés. Resultados: Han sido encontrados 1.595 estudios relacionados con la utilización de lipossomas y 77 con nanopartículas lipídicas. Pocos estudios han reportado la evaluación en vivo de las nanopartículas lipídicas (28 publicaciones) en relación con los lipossomas (472 publicaciones), desde que los lipossomas han sido desarrollados dos décadas antes de las nanopartículas lipídicas. Cuatro medicamentos con liposomas ya están aprobados y se utilizan en la clínica, mientras que sólo uno con nanopartículas lipídicas está bajo investigación clínica, en fase I. Conclusión: De manera general, el número de estudios relacionados a la utilización de la nanotecnología para el tratamiento del cáncer se ha incrementado de manera rápida. Así que es importante saber hacer la distinción entre los diversos tipos de nanocarreadores y sobre todo conocer cuales ya están en utilización en la clinica. Hay pocos estudios clínicos con nanocarreadores lipídicos, sin embargo, eses sistemas presentan un gran potencial para mejorar la práctica clínica en oncología.